Dirigió El Apologista Universal, obra periódica de la que editó dieciséis números entre 1786 y 1787.
[1] Utilizó los seudónimos de Eugenio Habela Patiño, Policarpo Chinchilla, José Antonio Flox y Simplicio Benedicto.
[1] Su objeto, según escribía Juan Sempere y Guarinos, cuando la publicación iba por la decimocuarta entrega, era «ridiculizar algunas obras muy malas, costumbres y expresiones extravagantes, particularmente en materia de literatura», para lo que, añadía:
Menos favorable es el juicio de Menéndez Pelayo, que encontraba en la publicación algunos chistes buenos «y otros pesados y frailunos», acusando cierta monotonía en el continuado recurso burlesco a la defensa irónica de todo aquello que en realidad se proponía atacar.
[8] Forner, «archipoeta asiático», protagonizaba precisamente el número prohibido por la censura que puso fin a la publicación.