Su vida pública comenzó en la década de los 60, liderando una corriente política disidente del Partido Conservador Ecuatoriano, llamada Democracia Cristiana.
Obtuvo el penúltimo lugar, con el 1,07%, porcentaje más bajo que ha obtenido un expresidente en la historia nacional.
Ocasionalmente, brinda conferencias en universidades privadas y entrevistas frecuentes en los medios.
En 1975 se unió al Consejo Político Mundial de la Democracia Cristiana y tres años después colaboró en la puesta en marcha de Democracia Popular-Unión Demócrata Cristiana (DP-UDP), coalición que pasó a liderar.
En 1968 contrajo matrimonio con Margarita Pérez Pallares, con quien tendría cinco hijos,[5] siendo los dos últimos mellizos nacidos en el Palacio de Carondelet:[6] Con otros sectores progresistas fundó el partido Democracia Popular, del que fue varias veces director.
Les anunció, además, que trabajaría por resolver el problema energético, corregir el carácter concentrador de la economía ecuatoriana que iba en desmedro del campo y de los pobres, y llevar adelante las reformas educacional, fiscal, administrativa, política y agraria, constantes en el Plan Nacional de Desarrollo.
El sector privado alegó que las devaluaciones fueron causadas por las malas políticas del gobierno.
Este convirtió a sucres la deuda externa privada dolarizada, la denominada "sucretización", y aunque el Banco Central cobró comisiones para cubrir el riesgo de la tasa de cambio, una proporción grande de este riesgo se transfirió al Estado, que, además, extendió su garantía a la deuda externa privada.
Las medidas de ajuste fueron tomadas por el presidente mediante decretos ejecutivos contemplados en la Ley.
Hurtado presidió la Asamblea, la defendió con vigor cuando fue atacada y logró que los representantes llevasen a feliz término una obra difícil y renovadora, aunque por falta de tiempo no se discutieron a fondo algunos temas.
En cuanto a derechos, obligaciones y garantías ciudadanas, fue la Constitución más avanzada de América Latina.
[13] Durante el gobierno de Jamil Mahuad, Hurtado tomó distancia crítica a medida que el presidente no aceptaba las sugerencias del Partido ni los consejos de Hurtado.
Un grupo de diputados del Partido se había sumado a la oposición y terminó por declararse independiente.
Actualmente da conferencia y entrevistas frecuentes en canales de televisión, criticando y declarando al gobierno del Presidente Correa como dictatorial, siendo uno de sus más fervientes opositores.