Los visigodos fueron un pueblo germánico que penetró en Hispania a principios del siglo V, si bien no consolidan por entero su condición de gobernantes del reino hispano-visigodo hasta un siglo después.Aunque muy deteriorada, muestra una planta de nave única que termina en un ábside.Las piezas están repartidas entre el Museo Cluny de París, la Armería del Palacio Real y el Museo Arqueológico Nacional, ambos en Madrid.De las coronas, la Corona de Recesvinto es la que más llama la atención por su orfebrería y belleza, con letras colgantes de la misma, en ella se puede leer «Reccesvinthvs Rex offeret» («El rey Recesvinto [la] ofreció»).Las iglesias visigodas estuvieron decoradas con grandes conjuntos pictóricos, hoy prácticamente desaparecidos.Por otra parte, hay dudas sobre la datación del manuscrito iluminado conocido como Pentateuco de Tours, que algunos especialistas catalogan como una obra del siglo V de un scriptoria hispalense.De hecho, algunas soluciones que aparecerán posteriormente en los beatos mozárabes ya se encuentran en este trabajo[6]
Placa y hebilla de cinturón. Bronce y hierro fundidos con decoración en pasta vítrea siguiendo la técnica del mosaico de celdillas o "cloisonné". Siglos V-VII. Procedentes de la necrópolis visigoda de Castiltierra, Segovia. Museo de Málaga, España
Pintura mural de la bóveda del ábside de San Miguel de Tarrasa. Siglo
VI