Existe un buen grado de consenso histórico en que las tribus indígenas que poblaban el territorio comprendido a ambos lados del río Uruguay eran fundamentalmente del tronco guaranítico, aunque conformados en diversos agrupamientos y de distinto comportamiento.
El mismo cacique guaraní llamado Andrés Guazurarí (Andresito Artigas), considerado por Artigas como su heredero político entre los indígenas, tomó parte en la reconquista de las Misiones Orientales hasta su derrota en manos del ejército brasileño.
Según una interpretación basada en una perspectiva marxista, se buscaba ocupar sus tierras para afianzar la dominación de la clase social que encarnaban, y que ya ejercían virtualmente desde el final del régimen virreinal.
Al tener asegurada la frontera con Brasil, los indígenas ya no eran necesarios para la nueva organización del Estado.
Por su parte, el antropólogo Daniel Vidart sentó como dato histórico que la tribu así denominada, se desplazaba en forma permanente por el territorio de la Banda Oriental, provenientes de la Mesopotamia del otro lado del río Uruguay; siendo utilizada a modo de befa la palabra del gallego "charrúa", que define a un personaje del Carnaval, rubicundo, desmelenado, vestido con harapos, portando unas sonajas que sacude furiosamente.
Una versión más actual, sostenida por el sociólogo y lingüista Anselmo Jover Peralta afirma que el término "charrúa" es una deformación de la palabra de origen guaraní "cherarúa", que significa "mi contrario", o también, "el otro".
Ya en París, Curel incumplió aquella solicitud y los cuatro fueron exhibidos como ejemplares exóticos de América.
[9] Han surgido estudios que ponen en duda el origen charrúa de los cuatro aborígenes llevados a Francia.
Bernabé Rivera informó que habían conseguido escapar 18 hombres: «8 muchachos de siete a doce años y cinco chinas de bastante edad» y, con ellos, Polidoro, único cacique sobreviviente.
Cuando se encontraban en la parte central de la misma, los indios atacaron, matando a varios oficiales y soldados.
[12] El episodio ha sido, hasta en los tiempos actuales, motivo de encendidas polémicas y controversias.
La misma norma dispone que el Poder Ejecutivo y la Educación Pública, deberán coordinar diferentes acciones para informar y sensibilizar a la ciudadanía sobre el aporte indígena a la identidad nacional, los hechos históricos relacionados a la Nación Charrúa y lo sucedido en Salsipuedes el 11 de abril de 1831.