En idioma japonés, este mar se llamaba tradicionalmente Hokkai (北海), o «mar del Norte», pero como este término se utiliza ahora para referirse al mar del Norte europeo, el nombre se ha cambiado por Ohōtsuku-kai (オホーツク海), que es una transliteración del nombre ruso.Tiene una superficie total de 1 590 000 km², lo que lo convierten en el 15.º mar del mundo por extensión.En invierno, la mayor parte del mar de Ojotsk, excepto el área que rodea las Kuriles, está congelado, haciendo difícil, e incluso imposible, la navegación por sus aguas.En verano, la banquisa se derrite y el mar vuelve a ser navegable.Como el Peanut Hole no estaba en la ZEE rusa, cualquier país podía pescar en él, y algunos empezaron a hacerlo en grandes cantidades en 1991, sacando quizás hasta un millón de toneladas métricas de abadejo en 1992.Barcos balleneros de Estados Unidos y europeos cazaron ballenas en este mar en el siglo XIX y principios del XX.[2][3][4][5][6][7] Las poblaciones de ambas especies de ballenas disminuyeron drásticamente, y los historiadores occidentales llegaron a pensar que la última se había extinguido.Además, en la isla japonesa de Hokkaidō están Abashiri, Monbetsu y Wakkanai.En la plataforma del mar de Ojotsk que se extiende a lo largo de la costa han sido identificadas veintinueve posibles zonas petrolíferas y gasísticas.La plataforma estaba subcontratada a una empresa que trabaja para el gigante energético ruso Gazprom.La Compañía ruso-americana monopolizó toda la navegación comercial en el mar en la primera mitad del siglo XIX.El primer resumen detallado de la hidrología del mar fue preparada y publicado por Stepán Makárov en 1894.La Flota Soviética del Pacífico utilizó el mar de Ojotsk como un bastión de los submarinos con misiles balísticos, una estrategia que Rusia aún continúa.
Mapa de la fortaleza de Ojotsk. 1737.
Mapa italiano de 1682, que muestra, arriba a la derecha, el cabo de Aniva, el cabo de la Paciencia, Staten Island (
Isola di Stati
) y el
estrecho de De Vries
, los accidentes que había descubierto la expedición de De Vries de 1843. Como refleja el mapa, los cartógrafos de la época pensaban que las islas de
Hokkaidō
y la
Sajalín
formaban parte del continente.
La mayoría del mar de Ojotsk, salvo la isla de Sajalín, ya estaba bien cartografiado en 1792.