Allí entabla amistad con el pintor Baldomero Romero Ressendi y empieza a cultivar sus aficiones literarias.
Publica algunos textos en la prensa (desde 1948 en el diario "Sevilla", en 1949-50 como colaborador fijo del semanario "Trofeo", así como en la revista mensual "Estela", en la que es nombrado redactor-jefe), entrevista al novelista William Somerset Maughan a su paso por Sevilla y, cada vez más volcado a la escritura, en cuarto curso deja los estudios de Derecho para entrar a trabajar en 1950 como guionista, locutor y, más tarde, jefe de programación en Radio Nacional de España.
La denuncia de la marginación social del campesinado andaluz o la crítica al señoritismo son motivos frecuentes en la obra de estos artistas, vinculados a Comisiones Obreras y al Partido Comunista Español.
Con más de setenta libros y cincuenta mil artículos publicados, Manolo Barrios ve, sin embargo, truncada su carrera literaria por oponerse a los diversos stablishments del posfranquismo.
Como destacó la crítica, “autores teatrales como Manuel Barrios Gutiérrez, han vuelto a poner en el escenario personajes que hablan en andaluz, sin avergonzarse por ello”.
En 2005, cumplidos los ochenta años, inició su última etapa como articulista de prensa, colaborando asiduamente en la edición local del diario La Razón, dirigida por Paco Reyero.