Luis Coloma

Fue hijo del acreditado médico Ramón Coloma Garcés, casado en segundas nupcias con Concepción Roldán.

Luego se trasladó a Madrid, donde trabajó una breve temporada como pasante en el bufete del abogado Hilario Pina.

A favor del autor se declaró, entre otros muchos grandes intelectuales, Emilia Pardo Bazán en su revista Nuevo Teatro Crítico, alabando el realismo naturalista de su texto pero censurando la visión moralista de su autor.

Entre las críticas adversas destacó la de Juan Valera, quien evidentemente picado por el éxito de Pequeñeces, señala con ironía supuestas contradicciones del novelista a la hora de moralizar en Currita Albornoz al padre Luis Coloma; se hizo célebre una frase suya en ese sentido: El periodista Manuel Martínez Barrionuevo (1857-1917) publicó contra esta obra Un libro funesto: Pequeñeces, del Padre Coloma (Barcelona, 1891), folleto que tuvo tanto éxito como la misma novela, reimprimiéndose ocho veces.

Interesantes son asimismo sus Recuerdos de Fernán Caballero (1910), una autora a la que Coloma imitó en un principio.

Al jesuita se le ocurrió la historia del Ratoncito Pérez,[5]​ protagonizada por el Rey Buby, que era como la reina María Cristina llamaba a su hijo.

Desde entonces el Ratoncito Pérez es un personaje muy popular entre los niños españoles e hispanoamericanos, a los que pone un regalo bajo la almohada cuando se les cae un diente.

Caricaturizado en la portada de Madrid Cómico por Cilla (1891)
Recepción de Coloma en la Real Academia Española (1908)
Portada de edición de 1911
Placa
Busto en Jerez de la Frontera
Instituto en su nombre en Jerez de la Frontera