Aurora Bautista

Su primera película, Locura de amor (1948), la aupó al estrellato, y la llevó a ocupar un lugar destacado en el cine histórico del franquismo.

Caracterizada por sus vehementes interpretaciones, también realizó incursiones notables y contenidas en un cine más de autor en La tía Tula (1964) o Amanece, que no es poco (1989) y desarrolló una carrera teatral.

En 1964 volvió a España para renovar su éxito y conseguir sus mejores críticas por su interpretación como protagonista de La tía Tula, película de Miguel Picazo en la que intervinieron Carlos Estrada, Enriqueta Carballeira, Irene Gutiérrez Caba y José María Prada.

En 1966 rodó en México El derecho de nacer, con gran éxito, bajo la dirección de Tito Davison, basada en la obra del escritor cubano Félix B. Caignet, en donde tuvo un papel protagómico importante al lado de Fernando Marcos, Julio Alemán, Maricruz Olivier, Irma Lozano y Eusebia Cosme.

Con posterioridad apareció puntualmente en el cine y en papeles secundarios en El mirón, Extramuros, Divinas palabras, Amanece, que no es poco o Tiovivo c.1950.