En la industria alimenticia estos agentes leudantes se emplean en las masas elaboradas tanto en panadería como en repostería.
Este papel lo realizan en los procesos culinarios, por regla general, las proteínas existentes en los alimentos.
Amelia Simmons fue la primera cocinera en documentar el uso de agentes leudantes artificiales en el pan, lo hizo en su obra titulada American Cookery.
En repostería a veces se añade el huevo, que es el encargado de aportar esas proteínas a las masas necesarias para crear la red que retiene los gases e hincha las masas.
El huevo contiene mayoritariamente como proteína la albúmina, es por esta razón por la que al añadir huevo a las masas permitimos que la albúmina favorezca la retención de gases provocada por los agentes leudantes.