La Gloria (Tiziano)

Se trata de un conjunto de figuras que representan al catolicismo, con la Trinidad (Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo en forma de paloma) en su cénit, rodeados por la Virgen María —vuelta hacia ellos con hábito azul purísima—, San Juan Bautista (ambos intercesores entre Dios y los hombres) y, descendiendo entre las nubes doradas en Gloria entre las que todos aparecen, varios personajes del Antiguo y del Nuevo Testamento: Moisés, quien porta las tablas con los Diez Mandamientos; Noé, quien alza una pequeña Arca en la que se ha posado una paloma con una rama en el pico; el rey David, que toca una especie de zanfoña o arpa... Todas las figuras se hallan en actitud de adorar a la Trinidad.

De espaldas, vestida de verde, se encuentra una figura que ha sido identificada con María Magdalena, o bien con la sibila Eritrea (quien profetizaba sobre el Juicio Final), e incluso con Judith, Raquel o la propia Iglesia católica.

Más abajo aún puede identificarse, como un anciano con barba, al propio Tiziano.

La composición dibuja un óvalo en cuya cúspide superior se halla el Espíritu Santo, a cuyos lados están el Padre y el Hijo; y en la inferior la vida terrena, con pequeñas figuras que podrían ser peregrinos.

En 1566 el grabador Cornelis Cort, colaborador de Tiziano, reprodujo la composición a buril, pero dado que no pudo conocer el cuadro original, hubo de basarse en una copia o dibujo que Tiziano le proporcionó.