Según se enunciaba en el Decreto de fundación, el Instituto debía ocuparse «especialmente en calcular y anunciar el tiempo probable á los puertos y capitales de provincia, sin perjuicio de los demás trabajos científicos y prácticos que se le encomienden».
Bajo diferentes denominaciones y adscripciones orgánicas, esta institución ha venido desempeñando el papel de "Servicio Meteorológico Nacional".
La última reestructuración tuvo lugar en 1978, cuando se renombró Instituto Nacional de Meteorología (INM) y pasó a depender del Ministerio de Transportes y Comunicaciones.
[6] Según el decreto de 2008, anteriormente mencionado, la Dirección General del Instituto Nacional de Meteorología quedó suprimida, pasando a denominarse Agencia Estatal de Meteorología y todos los bienes, derechos y obligaciones así como todo el personal del antiguo Instituto pasaron a ser competencia de la nueva agencia, sucediéndole en todas sus funciones y competencias, quedando suprimidas, igualmente, las siguientes subdirecciones: La Agencia Estatal de Meteorología tiene su sede institucional en Madrid.
La AEMET se estructura mediante:[3] Asimismo, para asegurar el correcto funcionamiento de la Agencia, existe una Comisión de Control que recaba información y se la transmite al Consejo Rector.