Como mínimo, cada grupo familiar permaneció entre 10 a 20 años en Venezuela antes de radicarse en forma definitiva en los Estados Unidos, como lo hicieron las familias Bach-Anderson, Christiansen-Gundersen, Eikland-Undheim y Holmberg-Noren,[14] entre otros particulares que realizaron labores educativas en la región.
Inclusive, la iglesia evangélica se estableció mucho antes que existiera presencia católica en la localidad.
En Maracaibo, la Misión Alianza Escandinava (MAE) estableció un colegio con las mismas características de la que se desarrolló en Rubio.
La Christiansen Academy[17] había sido un colegio internado privado al estilo estadounidense que proporcionó formación educativa desde el pre-escolar hasta la secundaria.
La escuela impartió sus clases fundamentalmente en inglés, siendo el castellano una asignatura de la malla curricular.
El apellido «Christiansen» se ha empleado para memorar la labor que él mismo, junto a su esposa Anna Gundersen Hansen y las maestras escandinavas Huldah Magnuson y Hanna Fex realizaron en Táchira.
Fue enviado en 1898 a Venezuela por una asociación de Londres, aunque dicho respaldo duró poco tiempo.
Pronto se establecieron en Caracas, donde constituyeron la congregación reconocida Iglesia Pentecostal Las Acasias.
[35] Sin embargo, el proyecto fue un rotundo fracaso, y 38 de las 40 familias que llegaron al país fueron deportados a Dinamarca[36] en 1940.