Posteriormente se remataría con un estilo renacentista y se completaría en 1742 con estilo barroco en el altar mayor y rococó el camarín de la Virgen del Rosario.
[1] El templo final se quedaría con un cuerpo de tres naves, conservando del medievo la cabecera mudéjar y el ábside semicircular al estilo románico.
Todo el edificio se cubre al exterior con teja árabe, a dos y tres aguas.
[3] En el interior, las tres naves estás separadas por arcos de medio punto.
[3] La estructura de la iglesia queda, por tanto, distribuida en:[3] Destaca el camarín de la Virgen del Rosario, cubierto con bóveda encamonada, decorada con yesería barroca del siglo XVIII y azulejos talaveranos.