Iglesia-fortaleza de Santa María (Ujué)

La cita proviene de la crónica musulmana del geógrafo Ibn Abd-al-Múnim al-Himyarí, que parece recoger un texto referido al reinado de García Sánchez I, mediado el siglo X.

Para Lacarra, «dichos tenentes gobernaban un conjunto conformado por el castillo, la población y un distrito territorial, y percibían la mitad de las rentas propias del monarca a quien representaban.

Estaban obligados a la defensa del lugar, para lo que contaban con cierto número de efectivos.» Los tenentes conocidos desde la segunda mitad del siglo XI son: Eneco Sanz, García Jiménez, Jimeno Garcés, Fortún López e Íñigo Fortuñones.

Esta adhesión pudo resultar determinante para lograr «que todo el reino (excepto el territorio al otro lado del Ebro que había invadido Alfonso VI) quedara en poder de los reyes de Aragón hasta 1134.

En su fachada sur, el paso se transforma en una galería abierta que proporciona una amplia perspectiva sobre la ribera de Navarra.

Se conserva la cabecera en tres tramos época románica, presentando un triple ábside semicircular junto con una torre adosada al muro meridional.

El camino de ronda recorren todo el perímetro del templo, abarcando los tres ábsides románicos.

El central conserva interesantes arcos románicos, en tanto que en los laterales sobresalen columnas con extraños capiteles y ventanas con arcadas ciegas.

Planta
Panorámica
Imagen de Santa María de Ujué