Historia de la provincia de Corrientes

Tanto los Kaingang como los Charrúas habían ingresado a la región hacia el 6000 a. C., mientras que los Guaraníes lo hacían hacia el 500 a. C., provenientes de la región amazónica,[2]​ para ubicarse en los márgenes del río Paraná y Uruguay.El territorio correntino presentaba hacia finales del siglo XIV, una diversidad étnica sustantiva, que iría cambiando con la llegada de los Guaraníes provenientes del Mato Grosso que iban bajando en oleadas migratorias desde el Amazonas.Su lengua formó parte de la familia lingüística mataco-guaycurú, guardando una mayor cercanía con el mocoví.Habitaron la región costera occidental de Corrientes, en el curso medio del río Paraná.Los primitivos correntinos se establecieron a lo largo de la costa del Paraná, formando comunidades seminómadas, que perdurarían hasta bien entrada la época colonial.[7]​ Mantuvieron relaciones hostiles con otros de sus habitantes, los belicosos charrúas (pámpidos), que luego dieron origen a la provincia de Entre Ríos en la Argentina y a la República Oriental del Uruguay.A partir de ese momento la religión del conquistados transmitió imágenes y prácticas a los aborígenes, quienes agrupado en encomiendas y misiones, las asimilaron sin que varias de las viejas creencias animistas propias desaparezcan sino, por el contrario, dando origen a una rica gama de mitos y leyendas surgidas del sincretismo religioso que caracterizó desde entonces al "correntino mestizo".El mismo movimiento dio origen ese año a Santa Ana de los Guácaras, Itatí y Santa Lucía, cuyos pobladores se tomaron en su gran mayoría de la población amerindia local.Entre ellos Manuel Florencio Mantilla, que sostiene que el sitio de las Siete Corrientes situado a corta distancia de la unión de los ríos Paraná y Paraguay fue dado “porque el terreno hacía siete puntas, que salían al río, en las cuales las corrientes del Paraná eran más fuertes”.En un Informe de Juan de Rivadeneyra a Felipe II en 1581, se refiere a las tres Gobernaciones en la región y, al explicar la segunda, afirma: “La segunda gobernación no es menor que la primera ni menos rica, antes se tiene noticia de más gentes y mayores riquezas, porque empieza desde la boca del Río de la Plata a la mano izquierda, como imo de España, desde el cabo Blanco hasta las Siete Corrientes que es donde se dividen y apartan los ríos que dan el nombre al Río de la Plata, que se llama el Paraná y el Paraguay…” Fue Ramón Contreras el defensor más lúcido de esta interpretación y explica que esa pequeña región del Paraná, recibe a su derecha por la parte del Chaco los cuatro pequeños ríos llamados Negro, Tragadero, Yné (río Hediondo), otro más que le sigue al N.E.[9]​ Numerosas misiones jesuíticas se instalaron en el noreste de la provincia, donde desarrollaron una intensa y peculiar labor evangelizadora.La población guaranítica dio lugar a buena parte del tejido social que fue la base para la organización de la provincia actual.En 1762, milicias correntinas se movilizaron por orden del Gobernador de Buenos Aires para abrir un camino entre Corrientes y Tucumán.Estas tareas serían costeadas por la población correntina, lo que causó indignación popular e inmediata reacción contra la orden.El gobernador dispuso que Corrientes enviara otros doscientos hombres en reemplazo de los desertores.Esta posición provenía del antiguo derecho español y había sido dejada en desuso por el absolutismo.Como el gobernador designó a un representante suyo para que impusiera sus órdenes, la casa de este último fue asaltada por los comuneros.La rebelión duró 6 meses y fue derrotada por las autoridades realistas; sin embargo, independientemente del resultado del alzamiento, los rebeldes sostenían que si las decisiones de las autoridades se oponían a los intereses de la población, esta no tenía por qué obedecer.Las represalias del gobierno central incluyeron el traslado al río Uruguay del transporte comercial que se desarrollaba en el Paraná, lo que fue un duro golpe a la economía local, basada en la construcción naval —proveyendo de carpintería naval a todo el Virreinato— y los tejidos destinados al autoabastecimento y la provisión de los mercados vecinos.[13]​ Poco después eran recibidas las escasas tropas libertadoras al mando del general Manuel Belgrano pasando a revistar voluntariamente en ellas muchos jóvenes correntinos.Un cabildo abierto reunido en la capital eligió a Méndez como gobernador de la provincia.A la derrota de Artigas, el gobierno provincial quedó en manos del Supremo Entrerriano, Francisco Ramírez, que poco después proclamaría la República de Entre Ríos, que comprendía también el territorio correntino.Atienza intentó incorporar los territorios misioneros a su jurisdicción, obteniendo respuesta favorable del comandante Félix de Aguirre.El área al norte del río Aguapey comandada por Nicolás Aripí, se negó a incorporarse a Corrientes y fue ocupada por tropas paraguayas en diciembre de 1821 que destruyeron totalmente los pueblos misioneros.Los límites con Corrientes fueron fijados por este tratado en el río Miriñay y la Tranquera de Loreto.El quinto y último formó parte del Ejército Grande que derrotó a Rosas en la Batalla de Caseros.Sin embargo, tal tratado no fue aceptado por ningún gobierno nacional argentino.Éste gobernó la provincia por casi diez años, manteniéndose en un punto intermedio entre la Confederación Argentina, a la que legalmente pertenecía y cuya Constitución había hecho jurar, y el rebelde Estado de Buenos Aires.Aunque las guerras civiles argentinas pueden darse por terminadas en esa fecha, en la provincia de Corrientes hubo esporádicos enfrentamientos en la década siguiente.Aún en fecha tan tardía como 1933, una breve revolución radical liderada por el general Gregorio Pomar llegó a tomar algunas localidades del este correntino.
Bandera de la Provincia de Corrientes.
El Libertador José de San Martín, nacido en el actual territorio correntino.
El Protectorado Artigas - Liga Federal
Combate de Pago Largo de Juan Manuel Blanes.
Llegada de los refuerzos brasileños á la ciudad de Corrientes ( Paraná ) para el ejército de operaciones ( J. Gaildrau , L'Illustration , 1866).
Planta de la ciudad de Corrientes (1867).