Hipias de Élide

[6]​ Fue un hombre de carácter agrio, gran versatilidad y descomunal memoria, sobre la que investigó creando varios sistemas mnemotécnicos.Con la seguridad característica de los últimos sofistas, se atribuía a sí mismo autoridad en todos los temas, participando en foros públicos con éxito económico sobre filosofía, poesía, gramática, historia, política, arqueología, matemáticas, geometría y astronomía.Según estos diálogos, Hipias era un personaje algo ampuloso, áspero y con poco sentido del humor.[11]​ Friedrich Ast niega la autenticidad de los diálogos, pero debieron ser escritos por un autor contemporáneo, dado que aparecen mencionados en la literatura del siglo IV a. C. Aristóteles cita el Hipias Menor en Metafísica 1025a6, pero sin mencionar su autoría.Él forma parte del enlace que conecta los primeros grandes sofistas, Protágoras y Pródico de Ceos, y los innumerables erísticos que hicieron caer su prestigio.