Guadamecil
La etimología de guadamecil, o sus variantes guadamací o guadamecí, es una variante de "gadamesí", en árabe andalusí ḡadamisí, que por su parte deriva del gentilicio árabe ḡadāmisī, propio de la ciudad magrebí llamada desde muy antiguo Gadamés,[1] ya que en ella se especializaban curtidores, marroquineros y talabarteros que exportaban sus característicos cueros decorados y brocados.Los árabes, y anteriormente otros pueblos nómadas, hacían gran uso de las pieles curtidas para sus tiendas móviles.Le siguieron Sevilla, Toledo y otras poblaciones, entre las que figura Barcelona desde principios del siglo XIV, si no antes.Dichas tapas suelen ser de estilo mudéjar en los siglos XIV, XV y principios del XVI y platerescas durante el último, en España, con otras semejantes, de Italia.Actualmente en España se trabaja en talleres artesanos en la ciudad de Córdoba fundamentalmente, cabiendo destacar la figura del artesano y artista Ramón García Romero, quien ha sabido rescatar esta magnífica técnica omeya olvidada en el tiempo.