A lo largo de Mongolia existen casas típicas denominadas Yurtas (casa de los nómadas) que tienen la denominación de "Ger" y que se encuentran en intervalos regulares cercanos a las carreteras, estas casas operan como los restaurantes dando comida a los viajeros.
En las yurtas se suele cocinar en una especie de wok o en una pequeña plancha metálica, empleando grasas animales como combustible.
El plato más conocido en los ambientes rurales es el cordero, servido a veces asado sin ningún otro ingrediente.
En este caso la carne, junto con las verduras, se llega a cocinar gracias al calor que emiten las piedras.
Se ha pensado que el hot pot pudo haber tenido sus orígenes en la cocina mongola, pero esto está muy en discusión.