[8] Muchas especies animales encuentran en ellas menos presión y algunos grandes mamíferos (caprinos, ciervos, llamas, lobos, osos, leopardos de las nieves, puma, vicuñas, yaks), se han convertido en sus emblemas.
Las montañas han inspirado durante mucho tiempo miedo a los seres humanos y siguieron siendo en gran parte desconocidas hasta los primeros estudios científicos serios en el siglo XV.
[36] En onomástica, un orónimo es un topónimo de montaña, aunque a veces se utilizan para simples alturas (escarpes, colinas).
Cabeza y berg, utilizados como sufijo, son comunes en el este de Francia,[39] junto con los ballons (del alemán Belchen).
[39] El término mendi, montaña en euskera, que constituye muchos topónimos, se aplica a cualquier altura, incluso baja.
1] Cuando han experimentado una glaciación, las cimas pueden presentar una forma de pico piramidal que domina los valles y circos glaciares.
La noción de altura relativa o prominencia topográfica se desarrolló para tener en cuenta la importancia del relieve.
[86] El aislamiento topográfico es la distancia que separa un vértice del punto más cercano con elevación superior o igual.
En la parte intermedia se encuentra la «zona de transporte», que brota entre las rocas, formando cuvetas y pequeñas cascadas en «escalones».
[105] Las fuerzas involucradas modifican el equilibrio gravitatorio por desplazamiento de las masas rocosas y afectan al geoide terrestre.[Po.
1] Cuando la litosfera continental se fragmenta y las dos placas comienzan a divergir, la extensión de la corteza hace que aparezcan fallas normales en el zócalo.[Gui.
1] A nivel de la corteza continental, son lístricos y compartimentan la base del zócalo en bloques basculados.[Gui.
1][106] Con la aparición de la litosfera oceánica, las rocas magmáticas remontan a la superficie y forman una dorsal.[Gui.
[123] De hecho, con su engrosamiento previo, la corteza se hace más dúctil por las modificaciones térmicas y físicas que ha sufrido.
[122][124] Entre las hipótesis que explican este fenómeno de extensión, llamado «convergencia sincronizada» o «post-orogénica», se incluyen la fluencia con derrame lateral en profundidad, la retirada del panel litosférico hundido, el desprendimiento por convección de la raíz litosférica y el desprendimiento del hundido.
[132][133] En los pisos inferiores se encuentra una vegetación similar a la del llano circundante pero a medida que se asciende van apareciendo especies más hidrófilas y más resistentes al frío; tras las últimas especies arbóreas aparece la pradera alpina seguida del roquedo e incluso la nieve perpetua.
[132] Los depósitos de material eyectado han construido especialmente a espesar y fertilizar los suelos en las zonas volcánicas.
[132] En los bosques templados del hemisferio norte, las coníferas dominan el piso subalpino con pinos, abetos, piceas, alerces y enebros.
[142] Los griegos, entre ellos Eratóstenes, Estrabón, Plinio el Viejo y Amiano Marcelino, nombraron a la cadena Hemodi (o Hemodos, Emodos, Imaos),[143] que significa 'cubierta de nieve'.
El mismo Saussure lo consiguió al año siguiente, y con su relato, popularizó la práctica del alpinismo en Europa.
[4] Estas, con Carl Troll definiendo las reglas,[4] se convierten en un objeto de investigación que moviliza progresivamente a la comunidad científica internacional.
[55] Está muy extendido en vastas regiones montañosas del mundo: en Asia, especialmente en el Sudeste, en la cordillera andina, en África y hasta en la cuenca mediterránea (restanques en Provenza).
[162] Las caídas y saltos de agua hicieron posible, gracias a la energía mecánica, hacer girar las turbinas hidráulicas.
Anteriormente, a grandes altitudes, eran el dominio exclusivo de los pioneros del alpinismo, pero ahora cada vez son más ampliamente visitadas.
8] Desde la antigüedad, la poesía didáctica, por ejemplo en los escritos del geógrafo y poeta Avienus, en Description de la terre, evocó misteriosos paisajes montañosos, pero en un estilo muy normalizado.[Th.
13] Así, para Gervase de Tilbury en su Livre des merveilles del siglo XIII, adquiere una carácter mágico, muy parecido a la visión celta.[Th.
En la tradición cristiana medieval, a menudo el Paraíso Terrenal se encuentra en la montaña del Purgatorio, como en la Divina Comedia de Dante.
En Europa, las iglesias y capillas a menudo se construían en las cimas de las montañas para cancelar anteriores cultos precristianos.
Las peregrinaciones a las montañas sagradas simbolizaban el desprendimiento gradual de la vida cotidiana y la ascensión espiritual.
Ol Doinyo Lengai, en Tanzania, es considerada la «montaña de Dios», sagrada para los masais, al igula que el Kilimanjaro.