Mont Blanc

En 1760 un científico de Ginebra, Horace-Bénédict de Saussure, ofreció 20 táleros a los primeros montañeros que consiguiesen encontrar una ruta hasta la cumbre del Mont Blanc,[13]​ la cual llevaba tiempo observando durante las anteriores expediciones que había realizado al macizo.

[2]​[14]​ La expedición fue considerada en su tiempo absolutamente extraordinaria, también debido al aura de supersticiones, leyendas y tabúes que rodeaban a la montaña.

Sin embargo, se cruzaron con el italiano Walter Bonatti, que los animó a continuar la marcha.

Les llevaron al refugio Vallot, pero antes de irse, proporcionaron a los alpinistas algunos alimentos y medicamentos para no dormirse.

[31]​ El Ministerio francés respondió, un año más tarde, que los mapas topográficos del tratado de 1860 fueron destruidos durante la ocupación alemana.

Al mismo tiempo se había construido en las proximidades, a 4365 m de altitud, un pequeño refugio para alpinistas, conocido como la «Cabaña Vallot».

A partir de 1920 la actividad en el observatorio decayó, y no servirá más que para algunos pocos estudios muy puntuales hasta que en los años 1970 el Centro Nacional de Investigación Científica francés (CNRS) lo confió al Laboratorio de Glaciología y Geofísica del Medioambiente (LGGE) que realiza allí mediciones químicas del aire, para estudiar la contaminación atmosférica, y analiza muestras del hielo.

[35]​ El laboratorio está alejado de toda infraestructura y se encuentra en un lugar absolutamente virgen, por lo que la energía eléctrica es suministrada por paneles solares.

Tres años más tarde, dos después de la muerte de Janssen, una grieta se abrió bajo el observatorio y su estructura empezó a dislocarse bajo la presión del hielo, por lo que tuvo que ser abandonado.

[38]​ Allí son recogidos datos sobre la radiación cósmica, que sirven de prototipo para otros dos famosos laboratorios, el del Gran Sasso d'Italia, en los Apeninos, y el CERN de Ginebra, que estudia las partículas elementales.

Estaba previsto inicialmente que subiera hasta la cima del Mont Blanc, pero el proyecto fue interrumpido por la Primera Guerra Mundial y luego abandonado.

No se conocen las causas del accidente, pero los expertos dijeron que si hubieran volado 30 m más alto o al oeste habrían sobrevivido.

Los helicópteros llegaron al lugar del siniestro, pero no se salvó ninguno de los 117 pasajeros.

El avión transportaba además 200 simios destinados a un laboratorio médico y, según testimonios de los socorristas, alguno sobrevivió.

El meteorólogo alpino Yan Giezendanner y el experto agrimensor Philippe Borrel,[63]​ afirman que debido al calentamiento del clima en la región, han predominado desde mediados del siglo XX los vientos húmedos de origen oceánico que traen un mayor aporte de nieve sobre la cumbre.

Sin embargo, en las zonas más bajas o aprovechando huecos protegidos de los vientos, algunas plantas consiguen arraigar como el ranúnculo de los glaciares, que se puede encontrar hasta 4000 m. Pero la flora se limita fundamentalmente a los musgos y a los líquenes.

Como testimonio del pasado minero en el macizo, sobre la vertiente italiana se encuentran dos antiguas minas de galena y blenda, abandonadas hace tiempo.

Una era ya conocida en la antigüedad con el nombre de Trou des Romains, debido a que fueron los romanos quieren iniciaron su explotación.

Otros minerales que se pueden encontrar en el macizo son: adularia (KAlSi3O8), ankerita (Ca(Fe++, Mg, Mn)(CO3)2), berilo (Be3Al2Si6O18), calcita (CaCO3), dolomita (MgCa(CO3)2), hematita (Fe2O3), fluorapatita (Ca5(PO4)3F), galena (PbS), siderita (FeCO3), titanita (CaTiSiO5) o epidota {(Ca2(Fe+++, Al)3(SiO4)3(OH)}.

El éxito del turismo invernal en aquellos años lo convirtió rápidamente en un fenómeno de masas.

Pese a estos eficaces servicios, cada año los graves accidentes en el macizo se cuentan por decenas (30 muertos en los Alpes en 1997[75]​).

Desde mediados del siglo XIX, los guías se han constituido en asociaciones y su profesión está reglamentada.

Se pueden encontrar más de cien vías para llegar hasta la cima, pero las «vías habituales» y las más utilizadas son estas:[81]​[82]​ Actualmente el Mont Blanc acoge a miles de alpinistas al año (alcanzan la cima entre 2000 y 3000 m), y está considerada falsamente como una ascensión larga, pero fácil por poco que se esté acostumbrado a la altitud.

El túnel estuvo cerrado tres años durante los que se han realizado importantes mejoras estructurales y reglamentarias para su seguridad, y se ha construido una vía de evacuación para los pasajeros debajo de la calzada.

[87]​[86]​ El teleférico del Mont Blanc permite enlazar en poco menos de una hora Courmayeur, en Italia, con Chamonix-Mont-Blanc, en Francia.

Sin embargo, la Segunda Guerra Mundial paralizó el avance del proyecto que fue finalmente inaugurado en 1948.

En 1951 la compañía francesa inauguró un nuevo teleférico que enlazaba Chamonix con Aiguille du Midi, sustituyendo al viejo funicular.

La obra fue realizada conjuntamente por Francia e Italia y el tramo de los glaciares supuso una proeza técnica para la época.

Los más importantes son: Desde la década de 1980 se están intentando establecer programas transfronterizos para compatibilizar las actividades humanas con la conservación del macizo del Mont Blanc, y para armonizar las medidas adoptadas en los tres países que lo comparten, Francia, Italia y Suiza.

[97]​ Estas perspectivas son un problema para los defensores del Mont Blanc y para los responsables políticos del valle, que ya en el verano de 2003 fueron retiradas varias toneladas de desperdicios y residuos dejados por los alpinistas en el Dôme du Goûter.

Mont Blanc en recreación tridimensional .
La iglesia parroquial de Chamonix, el Mont-Blanc, la Aguja de Gouter y el glaciar de Bossons pintados por el pintor y grabador suizo Jean-Antoine Link a finales del siglo XVIII .
Vista del Mont Blanc con el valle de Chamonix.
Carta topográfica del Atlas Sardo de 1869.
El mapa francés de 1865 desvía la frontera hasta la arista del Mont Blanc de Courmayeur .
Observatorio Vallot, en 1890.
Refugio Vallot , cerca del observatorio, en 2004.
El tranvía del Mont Blanc a su llegada a la terminal de Nid D'aigle.
La vertiente italiana del Mont Blanc: detrás del pico rocoso del Mont Blanc de Courmayeur, se distingue la cúpula nevada del Mont Blanc.
Cumbre del Mont Blanc en agosto de 2007.
Mont Blanc desde La Balme-de-Sillingy .
Panorama del Mont Blanc tras la primera nevada del invierno 2011/12, tomada desde un refugio al oeste de Courmayeur.
Lengua del glaciar de Bossons que baja de la cumbre del Mont Blanc hasta el valle de Chamonix.
Ranúnculo de los glaciares.
Vista satélite del Mont Blanc.
Cristal de cuarzo procedente de los Alpes.
Parte del Macizo del Mont Blanc visto desde la vertiente francesa.
La caravana del Dr. Bardy en 1880.
Parapentista en frente de la cumbre del Mont Blanc.
Cumbre del Mont Blanc con la parte superior del glaciar de Bossons y las rocas negras de Grands Mulets. Ésta es la primera ruta seguida para alcanzar la cima en 1786, conocida como de Grands Mulets.
Vista del Mont Blanc desde Aiguille du Midi .
Telecabinas del teleférico del Mont Blanc entre Aiguille du Midi y Punta Helbronner, con el glaciar valle Blanche en segundo plano.
El refugio de Cosmiques, visto desde los Grands Mulets.
Macizo del Mont Blanc con, de izquierda a derecha, el pico Dent du Géant, el glaciar Mer de Glace, la cadena de las Aiguilles de Chamonix, el Mont Blanc, el Dôme du Goûter y el pico Aiguille du Goûter. La fotografía fue tomada desde una avioneta sobrevolando el valle de Chamonix, a 4000 m de altitud.
Mont Blanc visto desde la plataforma de Rébuffat, en la Aiguille du Midi.
Primera página del poema Mont Blanc , de Percy Bysshe Shelley (1817).