El primer y único intento de instaurar un Estado federal en España se produjo durante la Primera República Española (1873-1874).
[4] La concepción de España de los federalistas ha sido definida como «nación pluriestatal que haría libres por igual a los ciudadanos y a los territorios», un «extraño híbrido», según Juan Francisco Fuentes, entre federalismo y jacobinismo.
A esa nueva fórmula se le llamó «Estado integral, compatible con la autonomía de los Municipios y las Regiones».
La victoria del general Franco en la guerra civil española (1936-1939) y la dictadura que instauró anularon dicho proceso.
[16] Sin embargo, el llamado modelo del café para todos ha sido comparado con un federalismo de tipo simétrico.