Explosiones en el puerto de Beirut de 2020

[8]​ Se cree que la explosión tuvo efectos equivalentes a tres mil toneladas de TNT.

[19]​[20]​ La explosión fue precedida por un incendio en ese almacén, pero la causa exacta de la detonación aún está bajo investigación.

A raíz de ello, estallaron protestas en todo el Líbano contra el gobierno por su incapacidad para prevenir el desastre, uniéndose a una serie más grande de protestas que han tenido lugar en todo el país desde 2019.

[25]​ Después de una inspección por parte de la autoridad portuaria, el Rhosus se declaró no apto para navegar por lo que se le prohibió hacerlo, ocho ucranianos y un ruso se hallaban a bordo, y con la ayuda del cónsul ucraniano, cinco miembros de la tripulación pudieron regresar, dejando a otros cuatro en el barco.

[26]​[24]​ El dueño de la nave, el empresario ruso con sede en Chipre, Igor Grechushkin entró en bancarrota y,[27]​ cuando todos perdieron su interés en el navío, lo abandonaron.

[28]​ Varios oficiales de aduanas solicitaron mediante cartas una salida para la carga confiscada, proponiendo que fuera exportada, donada al ejército libanés o vendido a una compañía privada en el Líbano.

[3]​ La segunda explosión fue mucho más sustancial y ocurrió aproximadamente a las 18:08:18 (hora local).

[33]​[34]​ La explosión fue escuchada en lugares tan distantes como Chipre, a 240 kilómetros de distancia.

En pocas horas, el hospital dio de alta a todos sus pacientes y cerró.

[48]​ The Daily Star, un diario libanés, reportó que su sede se destruyó parcialmente y que en varias partes el techo colapsó, las ventanas estallaron y hubo daño en el mobiliario.

A pesar de los daños, los vuelos al aeropuerto se reanudaron tras la explosión.

Dos miembros de la tripulación murieron[66]​ y varios a bordo sufrieron heridas.

El carguero CMA CGM Lyra se hallaba a 1.5 kilómetros y no tuvo ningún daño.

[72]​[73]​ Después de la gran explosión, muchas personas heridas quedaron en el suelo.

[74]​[75]​ Medios locales y el Ministro de Salud del Líbano, Hamad Hassan, indicaron que se temía que hubiese muchas víctimas, por la magnitud y extensión de la explosión.

Posteriormente, Hassan informó que centenares de personas habían resultado heridas.

[1]​[76]​ Testigos presenciales dijeron a la cadena LBC que los hospitales estaban abarrotados de personas heridas, y que decenas de ellas no habían podido recibir atención médica.

[28]​ La Cruz Roja Libanesa informó que todas sus ambulancias disponibles al norte del Líbano, Valle de la Becá y sur del país fueron dirigidas a Beirut para ayudar a los heridos.

[83]​ La aplicación de transporte Careem ofreció viajes gratis para aquellos interesados en ir a donar sangre.

[88]​ El gobernador de Beirut, Marwan Abboud, rompió en lágrimas en televisión, calificando lo ocurrido como «una catástrofe nacional».

[99]​ El 8 de agosto Hassan Diab, primer ministro del país, propuso adelantar las elecciones.

Humo rojo producto del nitrato de amonio que salió en la segunda explosión, visto sobre el cielo del Líbano.
El puerto de Beirut visto desde la Estación Espacial Internacional una semana después del desastre, con una vista ampliada del cráter de la explosión (arriba a la izquierda).
Fuerza Aérea de los Estados Unidos, suministro de servicios médicos.