Política del Líbano

El Líbano es una democracia parlamentaria regida por un marco confesionalista, en el cual los cargos principales son repartidos proporcionalmente entre las distintas comunidades religiosas del país.[1]​ El presidente es elegido por el Parlamento cada 6 años, y ambos eligen al primer ministro después de cada elección.El Presidente junto con el Parlamento elige al Primer Ministro, que debe ser un musulmán suní.Hoy en día, este grupo supone un 40% de la población, siendo el restante 60% musulmanes, bien chiitas (27% aproximadamente), sunitas (24%) y drusos (5%).Aun así, el gobierno libanés ha evitado establecer nuevos censos oficiales, que podrían desestabilizar el actual equilibrio sistema parlamentario.
Edificio del Parlamento del Líbano en la Place d'Étoile de Beirut .