Monumento funerario

Si únicamente es un lugar de recuerdo, sin referencia sepulcral, se suele denominar memorial (expresión no recomendada por la RAE, que prefiere "monumento conmemorativo").Son muy habituales los denominados "monumento al soldado desconocido", que a veces sí incluyen los restos de uno de ellos (denominándose propiamente "tumba del soldado desconocido").La enigmática Tumba de Alejandro Magno no se ha hallado.Allí también se enterraron Juana la Loca y Felipe el Hermoso.Los enterramientos papales se realizaron en distintas iglesias de Roma o Aviñón.En España, una iniciativa semejante (el Panteón de Hombres Ilustres) no ha tenido continuidad.Los totalitarismos comunista y fascista proporcionaron el entorno necesario para el denominado culto a la personalidad de los líderes carismáticos, a los que se les construyeron monumentos funerarios grandiosos.
Pirámides de Giza (Antiguo Egipto).
Tumba del Señor de Sipán (Antiguo Perú).
Taj Mahal (India).