En la tradición judía, nefesh (literalmente, ‘alma’) es el nombre que recibe una estructura funeraria monumental, definida como estructura «magnífica» o «espectacular», que se erige encima o al lado de una tumba.
El nefesh puede hacer alusión también a un elemento destacado del propio sepulcro, como un pórtico clásico erigido a la entrada de las salas de entierro, o un imponente remate, que convierten el lugar en un mausoleo propio.
Es cognada de la palabra árabe nafs (نفس), que significa tanto ‘alma’ como ‘propio’.
[3] En sabeo, lengua perteneciente al grupo árabe antiguo meridional, el término pudo haber sido usado directamente para un túmulo, es decir, un monumento concretamente por encima de la tumba; mientras que en el arameo de la época podría haber significado una gruta o cripta.
[5] En la cultura nabatea, basada en una interpretación limitada del aniconismo, la representación de deidades en betilos —relacionados con los nephesh arameos— carecía de figuras imaginarias, aunque sí podían esculpirse como figuras geométricas y otras para conmemorar a los muertos.