Enrique gobernó conjuntamente con sus hermanos Erico II y Alberto VII y su tío Baltasar a partir del 27 de diciembre de 1503.
El tratado estipulaba que Enrique gobernase en Schwerin y Alberto en Güstrow, sin una partición de facto del país.
La doctrina luterana se predicaba más o menos abiertamente ya en 1523 y quizás incluso antes.
Naturalmente, su posición lo llevó a dotar a la nueva doctrina con una firme organización interna y externa, de modo que pidió al superintendente Johann Riebling, a quien Lutero le había recomendado en 1537, que hiciera un proyecto de Orden de Iglesia, un catecismo y una Agenda según la confesión luterana.
Resistió la introducción del Interim de Augsburgo por el emperador Carlos V en 1548.