El avión tiene una rampa trasera para carga y descarga de grandes volúmenes.
El precio unitario está estimado en unos 50 millones de dólares,[6] mientras que la competencia vende modelos similares como el C-130J en hasta 62 millones de dólares estadounidenses.
Los medios aseguraron que esta aeronave no solo será utilizada por la Fuerza Aérea Brasileña, sino por el Ejército Brasileño y la Marina de Brasil, pero esto aún no ha sido confirmado por las agencias gubernamentales.
[19] A la época, también Chile y Colombia anunciaron acuerdos que se agregarían al equipo industrial de fabricación del KC-390 y intenciones de compra.
[20][21] En septiembre de 2010 se informó que la compañía checa Aero Vodochody podría fabricar algunas partes del KC-390.
En octubre de ese mismo año, Embraer anunció las negociaciones para que la FAdeA se uniera a la fabricación del modelo.
[22][23][24][25] Ya en el año 2011 se llevan a cabo las primeras pruebas de un modelo a escala definitivo para desempeño en el túnel de viento[26] y se firmaron los contratos para la producción del KC-390 entre Embraer, Aero Vodochody, OGMA y FAdeA.