[5][6] Al menos 136 800 edificios resultaron dañados o destruidos,[7][8] mientras se estableció un número de 2248 muertos, 329 desaparecidos y 12 763 heridos.
El terremoto ocurrió a 10 km de profundidad,[13] en una falla inversa que golpeaba hacia el oeste y se sumerge hacia el norte con un componente de deslizamiento lateral izquierdo, o una falla que golpea el sureste y se sumerge hacia el suroeste con un componente de deslizamiento lateral derecho.
[16] Más recientemente, la misma característica geológica también causó el terremoto de 2010 que mató a 316 000 personas.
La ciudad sufrió grandes daños, incluidos muchos hogares, lugares de culto y edificios comerciales derrumbados.
[34] Al menos 53 instalaciones médicas sufrieron daños parciales y seis quedaron totalmente destruidas.
Dos personas atrapadas bajo los escombros fueron rescatadas por trabajadores de la construcción cercanos.
[38] En Marceline, una pequeña ciudad a 30 minutos de Los Cayes, la principal iglesia católica se derrumbó y murieron dos mujeres que la limpiaban.
[41][42][43] El Hôtel Le Manguier en Los Cayos se derrumbó en el terremoto, matando a varias personas, incluido Gabriel Fortuné, el exsenador y ex alcalde de la ciudad.
[44][45] Partes de la residencia del obispo católico en dicha ciudad colapsaron, matando a un sacerdote y dos empleados e hiriendo al cardenal Chbly Langlois.
[46] Además de las muertes, al menos 12 268 personas han resultado heridas y 344 siguen desaparecidas.
Se estima que 81 000 haitianos no tienen acceso a agua potable.
Luego, los sobrevivientes fueron transportados a Camp-Perrin, donde recibieron tratamiento adicional por sus heridas.
Se ha citado al refugio como la mayor necesidad de la región afectada.
[56] Como resultado directo, muchas aldeas quedaron desconectadas y los habitantes comenzaron la reconstrucción voluntaria.
La confianza hacia el gobierno es baja en las áreas ya que los ciudadanos no esperan ayuda debido a las grandes complicaciones, movilizando aún más el proyecto voluntario.
[77] Las pandillas controlan las principales carreteras que se dirigen al sur.
Los secuestradores contactaron a las familias del médico, sin embargo, se desconocen las demandas de rescate.