Eduardo Caballero Calderón fue novelista, periodista, ensayista, diplomático y político colombiano dotado de una prosa fácil y diáfana, que escribió Siervo sin tierra (1954) es una novela basada en la vida de Siervo Joya, un campesino que vivió en Tipacoque (Boyacá).
[2] Estudió en el Gimnasio Moderno de Bogotá, donde fundó la revista El Aguilucho, primera publicación escolar en América Latina.
El primer periódico en donde escribió oficialmente fue El Espectador, poco después se vinculó a El Tiempo, donde se hizo cargo de una columna durante casi toda su vida, firmada bajo el seudónimo de Swann, y que lo llevó a dirigir, años después, el suplemento literario del periódico.
Su estilo impecable, en el que predomina el ensayo como su género de preferencia, lo lleva a mencionar, en sus obras, sus experiencias como político y diplomático.
En su novela El Cristo de espaldas y Siervo sin tierra, considerada una de las mejores de la literatura colombiana, combina con maestría una prosa fluida y eficiente con profundas reflexiones filosóficas sobre el destino y la rebeldía del hombre ante este destino aparentemente ya trazado.