Si tomamos como referencia las normas alemanas o suizas sobre calefacción se encontrarán típicamente en un rango de 20 kWh/m²/año a 30 kWh/m²/año.En otros casos surgió del ámbito académico y fue elevado a los organismos responsables de la gestión energética en cada país.Si vemos más allá de este concepto nos encontramos con conceptos como edificio ultra baja energía o edificio energía cero que independientemente que esté conectado a las redes urbanas de servicios (electricidad, gas natural, gas propano-butano (gas de refinería), agua, calefacción distrital, desagües pluviales, desagües cloacales, entre otros); el balance entre ingresos y egresos debe ser muy próximo a cero (+/- 10%).Sin embargo, en ausencia de estándares reconocidos, la combinación entre estas estrategias y por lo tanto el perfil energético a implementar, junto al impacto ambiental que pueda causar el edificio pueden variar significativamente.Son conocidos los apagones en los períodos climáticos extremos en grandes aglomeraciones urbanas como Nueva York, Los Ángeles, San Pablo, Buenos Aires, París, entre otros casos de conocimiento público.Con el escenario del cambio climático los estados han vuelto a programar la construcción de centrales nucleares si que aparezcan resistencias en la sociedad o en los grupos ambientalistas.