Pedro Duque Cornejo

Su larga vida le permitió desplegar una intensa actividad artística entre Sevilla, Granada y Córdoba, alcanzando una posición preeminente en el contexto del Barroco del siglo XVIII en España.Su obra, partiendo de la tradición de los grandes maestros sevillanos del siglo XVII, se distingue por su extraordinaria inventiva y por su versatilidad, pues trabajó por igual la talla en madera y en piedra, suministró modelos en barro para plateros, pintó al óleo, grabó al aguafuerte y fue un prolífico dibujante.[2]​ Paralelamente desarrollaba su faceta como grabador, como documenta la existencia de algunos aguafuertes firmados y fechados en los primeros años del siglo XVIII.[4]​ La compañía entre Duque Cornejo y Jerónimo Balbás volvió a reanudarse en 1711, cuando ambos contrataron el retablo mayor del oratorio de San Felipe Neri de Sevilla.[10]​[11]​ En esta etapa granadina, Duque Cornejo colaboró en varios proyectos del arquitecto Francisco Hurtado.Su mirada se clava en la cruz que sostiene en su mano izquierda.Duque Cornejo consolidó su trayectoria tras su regreso a Sevilla en el verano de 1719.Para este establecimiento jesuítico realizó el original retablo de la Capilla Doméstica y en torno a 1730 diseñó un homogéneo conjunto de siete retablos para la iglesia pública.Su intervención en este espacio consistió, por un lado, en la ampliación del primitivo retablo de mármoles, al que añadió dos calles laterales y un segundo cuerpo, y, por otro, en la ejecución en piedra del sepulcro parietal del arzobispo Salcedo, cuyo diseño imita el sepulcro renacentista del arzobispo Diego Hurtado de Mendoza, situado en el lado contrario de la capilla.[37]​ Las últimas obras que acometió en su ciudad natal se corresponden con las esculturas del retablo mayor del monasterio de San Leandro, contratadas en 1747, aunque se ha especulado con la posibilidad de que también diseñara el retablo que las acoge.[38]​[39]​ En 1747 Duque Cornejo se alzó ganador en el concurso convocado por la cabildo de la catedral de Córdoba para ejecutar una nueva sillería del coro de la catedral, aunque su traslado efectivo a esta ciudad no se produjo hasta el año siguiente.Sin embargo, por su avanzada edad el maestro solo alcanzaría a ejecutar el tabernáculo en su taller cordobés, proporcionando las trazas para el resto de altares.En el siglo XX, la tumba fue trasladada al centro del coro.
Magdalena penitente. Cartuja de Granada
Magdalena penitente. Cartuja de Granada
Retablo de Nuestra Señora de la Antigua. Catedral de Granada
Retablo de Nuestra Señora de la Antigua. Catedral de Granada
San José. Cartuja de Santa María del Paular
San José. Cartuja de Santa María del Paular
San Estanislao Kostka. Iglesia de san Luis de los Franceses, Sevilla
San Estanislao Kostka. Iglesia de san Luis de los Franceses, Sevilla
Retablo de san Francisco de Borja. Iglesia de san Luis de los Franceses, Sevilla
Retablo de san Francisco de Borja. Iglesia de san Luis de los Franceses, Sevilla
Sillería de coro de la catedral de Córdoba