Un depósito de valor, valor refugio o activo refugio[1] es cualquier bien que se considera que en el futuro mantendrá o aumentará su valor monetario de adquisición.
Los depósitos de valor más habituales en los tiempos modernos han sido el dinero propio del país donde se hace el depósito (ya sea en metálico o en cuentas bancarias a interés compuesto), divisas extranjeras, metales preciosos, piedras preciosas, antigüedades y obras de arte.
[8] Si la inflación aumenta, el poder adquisitivo disminuye y se impone un coste a quienes tienen dinero.
[9] Los trabajadores a quienes se les paga en una moneda que experimenta una alta inflación preferirán gastar sus ingresos rápidamente en lugar de ahorrarlos.
[9] En principio, esto podría aplicarse a cualquier producto industrial, pero el oro y los metales preciosos generalmente son los preferidos, debido a su demanda y rareza en la naturaleza, lo que reduce el riesgo de devaluación asociado con el aumento de la producción y la oferta.