Corona (tocado)

[1]​ El precursor de la corona fue la frontalera llamada diadema, que habían usado los emperadores persas aqueménidas.

[2]​ En la época del faraón Amenofis III (r.1390-1352c), llevar una diadema se convirtió claramente en un símbolo de la realeza.

La corona muralis militar romana no es un símbolo republicano sino una condecoración por el asalto exitoso a una ciudad.

Napoleón, según la leyenda, sorprendió a Pío VII cuando extendió la mano y se coronó, aunque en realidad este orden de ceremonia había sido preestablecido.

Los reyes de Occidente, en la Edad Media, gastan coronas en forma de aro cilíndrico de oro, adornado con pedrería y, a veces, con pinjantes; desde el siglo IX al XIII suelen montarse sobre el aro unos florones o puntas con bolas, y desde el XIII se estrecha el aro y se convierten los florones en trifolios, lo cual es muy común en los dos siglos siguientes.

Durante toda la Edad Media, las coronas heráldicas, muy variadas, se consideraron un simple elemento decorativo.

Durante el siglo XIV aún adornaban a menudo el casco y no tenían carácter nobiliario.

En el siglo XV apareció la costumbre de cerrar las coronas con arcos, pero no fue apenas en los siglos XVII y XVIII cuando los autores heráldicos comenzaron a codificar las coronas nobiliarias, cuya jerarquía y aspecto variaban de un país a otro.

Por extensión, el término indica a menudo el cargo mismo del cual estos sujetos son responsables.

Las piedras individuales en ocasiones tuvieron que venderse después de perder el poder o debido a problemas financieros.

La Corona de Hierro de los lombardos. Hacia 1312.