[5] El entonces director del periódico y su familia se asilaron en la embajada de Perú.
Turbas revolucionarias, incitadas por el frenesí del momento, pedían la ejecución de todos los editores que se oponían a Fidel Castro y la Revolución cubana.
[10] RSF afirma que “Cuba es la segunda mayor cárcel del mundo para los periodistas”, después de la República Popular China.
[11] Por otro lado, Cuba fue nombrada también como uno de los diez países más censurados del mundo por el Comité para Proteger a los Periodistas.
Además, no tienen permitido suscribirse a publicaciones del exterior ni recibirlas de visitantes o turistas extranjeros.
[17][18] Por su parte, el gobierno comunista estableció un estricto control ideológico sobre la industria del cine, y las películas comenzarían a recibir la censura del Instituto Cubano de Arte e Industria Cinematográfico.
[19] También se censuraron a varios artistas nacionales como Celia Cruz, Bebo Valdés, Meme Solís, Blanca Rosa Gil y Olga Guillot.
Por lo tanto, las notas estridentes que provenían de los barrios y caseríos que tanto preocupaban a las autoridades estatales cuando se escuchaban por primera vez comenzaron a ser “ablandadas”, implicando cierto nivel de autocensura.
[22] Los celulares estuvieron fuertemente regulados para ser utilizados solo por una élite de cubanos.
[23] Desde 2008 el gobierno de Raúl Castro permitió su compra para todos los ciudadanos.
[30] Fariñas luego agregó que “estaba listo para morir en su lucha contra la censura”.
Eso desató una campaña en la red por el libre acceso de los cubanos a Internet en esos locales.
Yoani expresó su sospecha de que las autoridades se retractaron gracias a las denuncias públicas.
[35] En el informe publicado en 2010 por Reporteros sin Fronteras sobre la libertad de prensa en internet, se señaló a Cuba, Birmania, Corea del Norte y Turkmenistán como los países más restrictivos del mundo en la libertad de acceso a la red.