Capilla de Montserrat

La fachada se presenta con un carácter monumental y simétrico, centrado en el gran portal con verja de entrada, formado por un arco escarzano con dovelas.La verja de la entrada da a un pequeño atrio con abundante ornamentación en los lados y en el techo.El artesonado de madera original del techo (destruido por un ataque de termitas nunca ha sido restaurado, por lo que aún hoy en día es evidente el daño causado por este insecto.Actualmente, la capilla cuenta con unas pinturas murales del pintor local Alfons Gubern Campreciós pintadas sobre tela encolada a las dos paredes laterales del ábside de la capilla, con la técnica acrílica.[1]​[4]​ La idea de la construcción del edificio nació cuando en 1888 Emilia Carles-Tolrà compra un solar por valor de 25 760 pesetas, solar donde se construyeron las Escuelas Pías, casa, colegio e iglesia.En el lado derecho predominan los colores oscuros, representando la manifestación de la Virgen de montserrrat a unos pastores por noche mientras velaban el rebaño, en la parte izquierda, con colores más vivos, está representado el día en que la Virgen es llevada a su emplazamiento definitivo.[1]​ Cada año, en esta aula se celebra la tradicional exposición de pesebres navideños.