Togolandia no poseía fuerzas militares para defenderse, sólo un cuerpo de policía.
[1] John Keegan identifica a las dos fuerzas militares que invadieron Togolandia como la Royal West African Frontier Force y los tirailleurs senegaleses.
El único centro urbano importante alemán que resistía en ese momento era Yaounda (la actual Yaundé).
Las tropas franco-belgas siguieron las vías del ferrocarril alemán hacia el interior rechazando todos los contraataques enemigos.
Sabukki, uno de los cabecillas, huyó al cercano Dahomey francés y la rebelión fue sofocada.
En el África Occidental Francesa estalló la Guerra de Volta-Bani que consistió en una rebelión anticolonial entre 1915 y 1917.
Sus éxitos les permitieron agrupar rápidamente a un número importante de etnias: Marka, Bwa, Samo, Minianka, Bobo, Dakkakari, Nuna, Fulbe, Toussian, Sambla, Winiamas.
Posterior a esto las fuerzas coloniales fueron ganando terreno y las últimas oposiciones armadas fueron destruidas en 1917.