La ciudad se extiende a ambas orillas del río, unidas por el puente Bonaberi.
En los barrios cercanos a Akwa existe mucho ambiente nocturno, mientras que en el barrio de Bonajo se encuentra la banca y el centro financiero y económico de la ciudad.
En la ciudad de Duala es usual encontrarse con varios restaurantes, bistrós y cafeterías con un toque francés, siendo visitados este tipo de lugares especialmente por turistas y por extranjeros que habitan en la ciudad.
En 1650 se había convertido en un asentamiento de emigrantes duala provenientes del interior, y durante el siglo XVIII fue un centro del comercio trasatlántico de esclavos.
El francés y el inglés son los idiomas oficiales, mas la mayoría de la población es francófona.
El clima es propicio para el desarrollo de ciertas enfermedades transmitidas por mosquitos como, por ejemplo, el paludismo.