A fines de los años cuarenta decide radicar en México e inicia su carrera, principalmente como actor en cintas como Lola Casanova (1948), Coqueta (1949), Confidencias de un ruletero (1949), ¿Por qué peca la mujer?
(1952), Sandra, la mujer de fuego (1954), Locura pasional (1954), Con quien andan nuestras hijas (1954), Los bandidos de Río Frío (1956), Pies de Gato (1957), Teatro del crimen (1958) y El ángel exterminador (1962), del cineasta mexicano (nacionalizado) Luis Buñuel.
César fue de los pocos actores que trabajo con todas las estrellas del llamado Cine de rumberas, ya que laboro al lado de Ninon Sevilla, María Antonieta Pons, Meche Barba, Amalia Aguilar y Rosa Carmina.
Entre los años sesenta y setenta compagina su trabajo en cine, en donde tuvo varias participaciones en películas de El Santo, con sus trabajos en televisión, entre los que destacan Muchacha italiana viene a casarse (1971) y Ana del aire (1973), historias protagonizadas por Angélica María.
Se casó con Teresa López con quien procreó dos hijos, César Andrés y Fernando Bruno.