La boca, también denominada como una cavidad bucal o cavidad oral, siendo en realidad divisiones en sí de la boca del aparato digestivo;[1] es la abertura corporal por la que se ingieren alimentos.
La mucosa, por ejemplo, puede verse más clara, pálida o con manchas blancas, indicador de proliferaciones epiteliales.
El equilibrio ecológico en la cavidad oral se mantiene mediante las interacciones entre especies.
[6] Por razón de las terminaciones nerviosas sensitivas de la mucosa oral, casi todas las enfermedades que afectan a la cavidad bucal no relacionada con los dientes se presentan con dolor.
Las alteraciones que afectan a la mucosa presentan ulceración, vesículas y cambios de color.