Esta toxina posee una estructura química basada en la magainina, un péptido que destruye las paredes celulares de hongos y bacterias, produciendo fuertes síntomas como sudoración excesiva y paro respiratorio.
[5] Aunque generalmente se la clasifica como una neurotoxina, la Batracotoxina tiene unos marcados efectos en los músculos cardíacos, lo que produce cardiotoxicidad.
La Batracotoxina interfiere en la conducción cardíaca, causando arritmias, extrasístoles y fibrilación ventricular que conducen a una parada cardiorrespiratoria Los cambios estructurales provocados en el tejido nervioso y el tejido muscular son consecuencia del influjo masivo de iones de sodio que producen una alteración osmótica.
Actualmente no existe ningún antídoto específico para contrarrestar el envenenamiento por Batracotoxina.
Algunos anestésicos locales pueden actuar como antagonista competitivos del receptor, impidiendo el efecto tóxico de la Batracotoxina.