La transformación del territorio en provincia provocó importantes cambios administrativos y fiscales,[3] y la imposición del stipendium no fue aceptada por las tribus locales que todavía gozaban de una cierta estructura política y capacidad de reacción,[4] de modo que en el 197 a. C., recién terminada la segunda guerra macedónica, estalló una gran revuelta en toda el área conquistada en Hispania a causa del expolio republicano.
[6] Quinto Fabio Buteón y Marco Helvio Blasión derrotaron a los celtíberos en la batalla de Iliturgi.
[6] El senado romano declaró la Citerior como provincia consular[6] y el cónsul Marco Porcio Catón el viejo se dirigió desde el puerto de Luna, bordeando el golfo de León con Publio Manlio como ayudante, dejando la Ulterior a Apio Claudio Nerón con tropas más reducidas.
Catón inicia en Emporion, una casi isla rodeada de marismas, donde coexistían la ciudad griega y la ciudad íbera separadas por una muralla, un duro entrenamiento entre las tropas, encontrándose con sus aliados ilergetes,[8] que en nombre de su rey Bilistages[9] le piden protección.
Estando igualada la batalla, por la noche, Catón atacó en cuña con tres cohortes, consiguiendo la desbandada de los íberos.