Arantxa Sánchez Vicario

Arantxa Sánchez Vicario nació en Barcelona, en 1971 en una familia con gran afición tenística, siendo la menor de los cuatro hermanos (Marisa, Emilio, Javier y Arantxa) del matrimonio formado por Emilio Sánchez Benito (1932-2016) y María Luisa Vicario Rubio (1936).

Sánchez Vicario se convirtió en la número 1 del mundo en el ranking de la WTA en la categoría individual en 1995 (durante doce semanas).

Sólo otras tres jugadoras han repetido este hecho, Martina Hingis, Lindsay Davenport y Kim Clijsters.

Fue jugadora de los equipos españoles que ganaron la Copa Federación cinco veces en 1991, 1993, 1994, 1995 y 1998.

Arantxa Sánchez Vicario fue también parte de los equipos españoles que ganaron la Copa Hopman en 1990 y 2002.

En su segunda participación, en Barcelona, compitió en individuales (perdió en semifinales ante Jennifer Capriati) y en dobles (consiguió la medalla de plata junto a Conchita Martínez).

Cuatro años después, en Atlanta 1996, perdió la final individual ante Lindsay Davenport y alcanzó las semifinales en la categoría de dobles, junto a Conchita Martínez.

Sin embargo, regresó en 2004 para jugar en algunos torneos de dobles y poder disputar sus quintos Juegos Olímpicos.

[5]​ En 2012 regresa a la competición como capitana de la Copa Federación de tenis junto al entrenador Gabriel Urpí, puesto en el que no consiguió una sola victoria del equipo español y tras poca implicación con el equipo, fue animada por la RFET a dimitir del cargo.

[11]​ La tenista fijó su residencia en Andorra para pagar menos impuestos, sin informarse bien de los requisitos legales.

[13]​ Su madre, Marisa Vicario, calificó dichas acusaciones como "falsas", al tiempo que acogió con dolor y sufrimiento las mismas.