Eddie Kramer, productor de Jimi Hendrix, Led Zeppelin y Kiss realizó su primera incursión en el thrash metal con este disco.
La grabación se desarrolló sin problemas, sin embargo, las diferentes visiones sobre el sonido final provocaron discusiones entre la agrupación y Kramer durante la mezcla en los estudios Compass Point, en las Bahamas.
[1][2][3][4][5] El batería Charlie Benante también era aficionado a conjuntos que tocaban música considerada extrema en aquellos momentos como Raven y Venom,[6] mientras que el guitarrista Scott Ian disfrutaba tanto del hardcore punk como del metal.
[9] La fusión de estos distintos gustos musicales dio lugar al segundo álbum de Anthrax, Spreading the Disease (1985), elogiado por la crítica por mostrar una decisiva progresión respecto al debut Fistful of Metal (1984) [10][11][12] y por introducir un sonido único, que se oponía a los riffs rápidos y pesados del thrash metal con la voz limpia y melódica de Belladonna.
[17][1] Anthrax había necesitado unos seis meses en 1985 para grabar Spreading the Disease, su primer disco para el sello Island Records y tras su lanzamiento llegó a vender más de 100 000 copias en todo el mundo.
[6][39] Ian destacó posteriormente su desconcierto a que los periodistas le preguntaran por qué había escrito una canción sobre la National Football League (NFL), y los criticó porque «no se han molestado en leer la letra o entender el tema».
[34] El último tema compuesto fue «Horror of It All» como tributo a Cliff Burton,[43] cuya muerte conmovió a todos los miembros del grupo,[38] además su introducción acústica tiene como título «A.D.I.», un acrónimo de «Arab Douche Intro».
[36] El conjunto quería un productor que pudiera capturar la energía de sus espectáculos en directo y por ese motivo recurrió a Eddie Kramer, que había trabajado con Jimi Hendrix, Led Zeppelin y Kiss.
[46][47] La banda grabó los nuevos temas durante unas seis semanas en los estudios Quadradial en Miami, Florida.
[48] Kramer organizó las sesiones como presentaciones grupales en vivo,[16] lo que entusiasmó al quinteto por la atmósfera y el sonido producidos.
[21] Finalmente la mezcla tuvo lugar en los estudios Compass Point, en Nasáu, Bahamas, que eran propiedad del presidente de Island Records, Chris Blackwell.
El mismo tipo de gente y luego, la única persona que sobresalía te saludaba con la mano, como un “¡hola!”».
[55] A su lanzamiento le precedió en febrero el sencillo «I Am the Law», en formato de 7 y 12 pulgadas que llegó al puesto 32 del UK Singles Chart.
[56][57][58] Ambas versiones añadieron la canción «Bud E. Luv Bomb and Satan's Lounge Band» como cara B, además la edición de 12 pulgadas también incluyó «I'm the Man»,[56][57] grabada durante las sesiones del disco y que fue una de las primeras en fusionar rap con metal.
[70] En 2005, la formación que grabó el álbum volvió a reunirse y durante su correspondiente gira interpretó varios de sus temas e incluso el disco al completo en algunas actuaciones,[14][21] algo que la banda volvería a hacer en 2013 y 2017.
[30] Malcolm Dome de Classic Rock apreció su «constante calidad» y escribió que «la maestría musical de Anthrax está a la par con cualquier cosa que Metallica estuviera haciendo en ese momento».
[75] Frank Trojan de Rock Hard afirmó que «las casi brutales “Indians” e “Imitation of Life” son realmente peligrosas para la salud y representan los momentos más destacados de un LP perfecto».
[74] El periodista Martin Popoff compartió su opinión sobre la música pero observó que la introducción por primera vez de «una ética punk» en pistas como «Caught in a Mosh», «Efilnikufesin» y «One World» comenzó a socavar «la seriedad del conjunto, algo que pronto causaría problemas de imagen».