Alicia Yánez Cossío

Desde pequeña dio muestra de su gran talento para las letras, por lo que siempre quiso ser una escritora.

[6]​ Alicia Yánez Cossío no conoció a sus abuelos, sin embargo ella imaginaba tenerlos y a sus amigos les comentaba los viajes que ellos realizaban a lugares extravagantes como África, y diría después: "Tuve una infancia sumamente feliz, quizá un poco hombruna, influida por mis primeras lecturas: las obras de Julio Verne y las hazañas de Tarzán.

Durante el viaje a Europa conoció al intelectual cubano Luis Campos Martínez, con quien más tarde se reencontró en Madrid y contrajo matrimonio.

[9]​ Residió desde 1956 hasta 1961 en la tierra de su esposo, periodo que coincidió con los años del proceso revolucionario cubano y que Alicia más tarde calificaría como "la lucha por recuperar la dignidad de un pueblo".

Este concurso fue organizado por el rotativo El Universo y su jurado otorgó el primer premio a esta obra.

El libro fue adaptado a la televisión en 2004 en la telenovela del mismo nombre, producida por Ecuavisa, aunque Yánez se mostró crítica de los cambios sustanciales que sufrió la trama.

En ella, el personaje central es una multitud que se destaca por luchar por los derechos de la mujer.

En 1995 publicó la novela El cristo feo, que le valió el Premio Joaquín Gallegos Lara a la mejor novela del año y el Premio Indigo Coté Femmes de París.

[23]​ Su obra infantil Los triquitraques, obtuvo en 2002 el premio Darío Guevara, otorgado por el municipio de Quito.

Ese mismo año, el presidente chileno Ricardo Lagos Escobar le otorgó la condecoración Gabriela Mistral.

[25]​ Dos años después apareció su última novela, Memorias de la pivihuami Cuxirimay Ocllo, escrita durante seis años y donde volvió a centrarse en un personaje histórico, esta vez en la princesa inca Cuxirimay Ocllo.