Las principales sustancias que provocan adicción son el alcohol, el THC, los alucinógenos, los inhalantes, los distintos opiáceos, los sedantes, los ansiolíticos, los estimulantes y el tabaco.
La adicción a sustancias viene determinada en gran medida por el abuso de estas.
[cita requerida] Sin la sustancia, las funciones del organismo que dependían de ésta se alteran.
[14] Incluso en personas con un riesgo genético relativamente bajo, la exposición a dosis suficientemente altas de una droga adictiva durante un período prolongado (por ejemplo, semanas o meses) puede resultar en una adicción.
En apoyo de esta hipótesis, los estudios en animales han demostrado que factores ambientales como el estrés pueden afectar al genotipo.
Estos estudios emplean un enfoque imparcial para encontrar asociaciones genéticas con fenotipos específicos y dan el mismo peso a todas las regiones del ADN, incluidas aquellas que no tienen una relación ostensible con el metabolismo o la respuesta del fármaco.
Los efectos importantes de los endofenotipos típicamente no pueden ser capturados por estos métodos.
[20] En 2020, las muertes por excesivo consumo más altas se registraron durante un período de 12 meses.
[22] Sin embargo, muchos investigadores, incluidos los neurocientíficos, indican que este presenta una explicación engañosa, incompleta y potencialmente perjudicial de la adicción.
Los conflictos familiares y el manejo del hogar también son una causa para que una persona se involucre en el consumo de alcohol u otras drogas.
Que se divide en: - Control deficitario: Consumo prolongado de grandes cantidades.
Se reducen o abandonan importantes actividades sociales u ocupaciones por el consumo de sustancias.
Este proceso consiste en la administración de la sustancia, un opiáceo potente con algún potencial para el abuso, como una copa en un entorno clínico supervisado.
Estos avances ya están siendo probados en ensayos clínicos en humanos y muestran promesas serias como medida preventiva y de recuperación para adictos o a personas propensas a la adicción.
[29][30] Por otra parte, otro método de tratamiento para la adicción que se está estudiando es la estimulación cerebral profunda (ECP).
Sin embargo, ante la escasa evidencia, y el riesgo grave de sesgo en el único estudio incluido en la revisión, no se pueden extraer conclusiones sólidas.
Por ende, es necesario realizar evaluaciones rigurosas adicionales que examinen los efectos de estos programas.
[33] También el término adicción se puede aplicar a las compulsiones que no están relacionadas con el consumo de sustancias.
A veces la compulsión no es hacer algo, sino evitar o «no hacer nada»; por ejemplo, la dilación (evitar como forma de conducta compulsiva), es decir, la procrastinación o posposición.
Puede haber factores biológicos y psicológicos que contribuyan a estas adicciones.
Hay muchas variables en que los estudios no están de acuerdo, entre los principales factores contribuyentes.
El riesgo de un futuro trastorno adictivo se incrementa en gran medida si una persona se expone a una sobrecarga constante o se involucra en el abuso de drogas durante la adolescencia debido a que es una etapa del desarrollo neurológico crítico que es sensible a este tipo de experiencias.
La investigación indica que este proceso se inicia en el sistema dopaminérgico límbico y posteriormente modifica otras partes del cerebro que reciben información de entrada de las neuronas afectadas.