Última visita de Ernesto Guevara a la Argentina

Guevara fue trasladado secretamente a la Quinta de Olivos y la noticia tomó estado público cuando éste abandonó el país.

Precisamente la reunión se realizó a instancias del presidente estadounidense John Kennedy, para que Argentina mediara ante un posible conflicto bélico entre la Unión Soviética y los Estados Unidos, las dos principales potencias mundiales.

Por esta razón la comunidad cubana anticastrista en Estados Unidos sostuvo públicamente que el presidente Kennedy era un traidor.

En los primeros sondeos, tanto John Kennedy como los cubanos se mostraron dispuestos a aceptar esa base para las conversaciones: Frondizi estuvo muy cerca de lograr una gran solución diplomática, pero no tuvo en cuenta los inconvenientes que encontraría en su frente interno.

Había llegado a Uruguay con la intención de negociar con Estados Unidos una solución al hostigamiento contra Cuba, pero que no lo vinculara con la Unión Soviética.

En ese momento Jorge Carrettoni, quién había sido diputado por la Unión Cívica Radical Intransigente y ahora ejercía como asesor del Consejo Federal de Inversiones y tenía enlaces directos con el Gobierno argentino, se entrevistó en Punta del Este con Guevara para motivar una reunión con el presidente argentino.

[1]​ Frondizi tomó los recaudos necesarios para resguardar la vida de Ernesto Guevara, ya que si su presencia en Argentina trascendía públicamente, su vida claramente correría gran peligro, teniendo en cuenta el clima de intolerancia política existente en el país.

[1]​ Jorge Carrettoni tenía órdenes del presidente Frondizi de no volar en el mismo avión en donde viajaba Guevara.

[18]​ Según el mismo Frondizi la reunión duró alrededor de setenta minutos, los hombres tomaron café y debatieron plácidamente.

Sin embargo, Guevara lo tranquilizó informándole de que eso no iba a convertirse en realidad.

Según Frondizi "me impresionaba, mientras él exponía, su humildad personal en relación con todas las cosas que había hecho.

Durante el viaje a la casa de su tía comentó que la zona había progresado, y al llegar a la casa se encontró con su tía además de su tío Martín Martínez Castro, el presidente del San Isidro Club.

Acto seguido ambos se abrazaron y emocionaron, Guevara con su voz quebrada dio la orden de partir.

[27]​ El ejército protestó formalmente ante estas reuniones con los líderes cubanos, y presionó al presidente para cambiar su política con respecto a Cuba.

Exiliados cubanos en Buenos Aires intentaron fraguar documentos con la intención de implicar a miembros del Gobierno en un supuesto complot castrista.

[28]​ Frondizi fue detenido y llevado prisionero a la isla Martín García tras haber sido derrocado por un golpe de Estado militar.

Varias décadas después, Oscar Camilión reflexionó al respecto que: En un reportaje realizado el 22 de agosto por la televisión cubana, Guevara dio algunas precisiones sobre la entrevista.

Ernesto Guevara leyendo el diario La Nación en Punta del Este , en agosto de 1961, días antes de su reunión con Arturo Frondizi en la Quinta presidencial de Olivos .
Fotografía aérea espía en Cuba , del lugar donde se instalaron las bases para los misiles nucleares, foto del 1 de noviembre de 1962.
Arturo Frondizi presidente de Argentina con el líder de Cuba Fidel Castro . Esta reunión volvió mucho más tensa la relación del presidente argentino y los militares.
Peugeot 403 negro un modelo similar al usado para transportar a Ernesto Guevara .
La Quinta de Olivos , lugar donde se llevó a cabo el encuentro entre Guevara y Frondizi .
El presidente de Brasil , Jânio Quadros (a la izquierda) y el presidente de Argentina, Arturo Frondizi (a la derecha). Ambos presidentes fueron derrocados muy poco después de concretarse su respectiva reunión con Guevara. En ambos casos los militares golpistas pusieron como excusa la reunión con el guerrillero.