Es una talla de candelero realizada en el siglo XVII por un autor anónimo, aunque ha sido atribuida a diversos escultores relacionados con el taller de Pedro Roldán, entre los que destaca su hija La Roldana.[4] Hasta el año 1654 la hermandad solo procesionó una imagen de la Virgen y un Crucificado del escultor Pedro Nieto.[5] Se desconoce el encargo para la realización de esta nueva obra para la hermandad, que puede datarse hacia 1680, y está atribuida al taller del escultor de Sevilla Pedro Roldán.En el momento en que es proclamada la Segunda República Española, algunos miembros republicanos saquearon diversos templos sevillanos, y ante el peligro una limpiadora trasladó la imagen a su casa y la metió en su cama simulando ser su hermana enferma.Llegada la noche, la trasladó al cementerio de San Fernando y argumentando ser un marmolista, la depositó en la sepultura de Joselito el Gallo, donde permaneció oculta durante dos meses sin que nadie, a excepción del torero Ignacio Sánchez Mejías (cuñado de Joselito) conociera su paradero.Asimismo, se conoció que los incendiarios se dirigieron a continuación al almacén de los pasos, situado frente al templo, pero al ser descubiertos por vecinos desde los balcones, desistieron realizar otro acto de vandalismo sobre las imágenes, pasos y objetos que se guardaban allí.Una vez finalizada la ceremonia la imagen regresó hasta su basílica, en una procesión que se prolongó durante doce horas por las calles de la ciudad.La Esperanza Macarena ha sido la imagen dolorosa sevillana que en más ocasiones ha realizado procesiones extraordinarias, esto es, fuera del periodo de la Semana Santa y por muy diversos motivos:[11] Se trata de una imagen perteneciente al Barroco, y fechada hacia 1680.El rostro muestra una belleza casi adolescente, con una mascarilla de excelente factura; posee una expresividad insólita estableciendo un modelo de Virgen dolorosa que ha sido imitado hasta la saciedad.En la actualidad mantiene la cabeza recta, con peluca natural (que perteneciera a la cabellera de Juanita Reina, la cual quiso donarla tras su muerte) y la mirada dirigida levemente hacia el suelo.Sus cejas arqueadas, acompañadas de los párpados hinchados y las mejillas enrojecidas reflejan el dolor y angustia ante la muerte de Jesús que pretende representar la imagen.Posee ojos realizados en pasta vítrea con el iris policromado en tonos castaños, y dispone de pestañas.Su boca entreabierta muestra la lengua proyectada hacia adelante, y tiene los dientes superiores tallados; recorren sus pómulos cinco lágrimas de cristal que simbolizan las cinco angustias padecidas por la Virgen.Con gran devoción la Hermandad saca ambas imágenes en procesión cada Semana Santa por las calles del Casco Antiguo de Barcelona.[13] En Estados Unidos se registran diversos puntos de devoción a la imagen.En la actualidad, se conserva un cuadro dedicado a la imagen, obra de la pintora Audrey Flack.[13] Finalmente, la iglesia del Corpus Christi de Miami es sede canónica de una hermandad que tiene por titulares a Jesús de Medinaceli, copia del madrileño, y a la Esperanza Macarena, en una talla realizada en 1998 por Miguel Bejarano, y que es sacada en procesión el Viernes Santo.Actualmente hay una Hermandad Sacramental y Cofradía de Nazarenos que tiene como titular a la Esperanza Macarena.
Bordadoras del taller de Rodríguez Ojeda con el manto camaronero de la Esperanza Macarena, que estrenó la imagen en el año 1900.