En 1973 se volvió a crear una organización de estudiantes secundarios con el mismo nombre, perteneciente al peronismo revolucionario o Tendencia Revolucionaria del peronismo.
El Ministro Méndez San Martín proyectó que la organización tuviera dos ramas, una femenina y otra masculina, a semejanza de lo que ocurría en el Partido Peronista, en tanto otras organizaciones políticas juveniles de la época como la Federación de Estudiantes Secundarios mayoritariamente radical, la Unión Nacionalista de Estudiantes Secundarios o la Federación Juvenil Comunista no tenían separación por género.
Varias agrupaciones empiezan a tomar contacto entre sí, en Capital Federal y Gran Buenos Aires.
Las principales fueron el MAS (Movimiento de Acción Secundaria) con base en el Colegio Nacional Buenos Aires y ligada las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR); FANDEP, agrupación universitaria que controlaba a un núcleo de militantes en la Escuela Superior de Comercio Carlos Pellegrini; y un grupo en el Colegio Nicolás Avellaneda.
Además Díaz participó de la creación del guion que llevó la historia al cine en 1986, en el filme homónimo.
Cuatro de los estudiantes secuestrados sobrevivieron a las posteriores torturas y traslados impuestos por la dictadura.