Según el Cantar de mio Cid (compuesto hacia 1200) la Tizón (su nombre hasta el siglo XIV)[2] pertenecía al rey Búcar de Marruecos y el Cid se la ganó en Valencia.
Hay otras Tizonas más a las que se les ha atribuido ser la del Cid.
Se conservaba desde por lo menos el siglo XVII en el Castillo palacio de Marcilla, en Navarra.
En este canal está grabada la leyenda «IO SOI TISONA FUE FECHA EN LA ERA DE MILE QUARENTA» («Yo soy Tizona.
Fue hecha en la era de 1040») (año 1002 debido a que en la península ibérica tanto cristianos como musulmanes usaban la Era hispánica, que comenzaba en 38 a. C. )[4][5] por una de las caras y por la otra «AVE MARIA GRATIA PLENA DOMINUS MECUM [sic]».
Todo ello responde a una tipología que data de fines del siglo XV.
La inscripción es claramente falsa; por ejemplo, la palabra Tizona se difunde solo a partir del siglo XIV, frente a Tizón, que es el término con que se la nombra en las fuentes más antiguas.
Menéndez Pidal considera que esta espada es una falsificación del siglo XVI.