Puede tener diversas formas, colores y tamaños, presentarse decorada o serigrafiada.
Quizá la característica común a todas ellas sea el asa que facilita su manejo.
[3] Para uso doméstico se fabrican en diversos materiales: cerámica, cristal, vidrio borosilicatado, plástico, e incluso hay desechables de papel, y, en menor medida, en metales como el aluminio o el acero.
Como vajilla habitual en las reuniones sociales, la taza ha alcanzado un curioso simbolismo de objeto representativo del bienestar e incluso el lujo.
[7] También es significativo que dicho pasaje esté al comienzo del primero de los siete volúmenes mencionados.